Este 1 de Octubre se celebró el Día Internacional del Café; así que para festejarlo, vamos a hacer un recorrido por algunas de las cafeterías que sirven y sirvieron durante años como lugar de reunión y charla alrededor de humeantes tazas de café.
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Carta del Café de la Paix
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Francia
-Café "La Rotonde", en el barrio de Montparnasse en París, lugar de reunión de pintores. Se daban cita allí Amadeo Modigliani y nuestro Benito Quinquela Martín.
-El "Café de Flore", también en París, vio pasar por sus mesas a Picasso, Albert Camus, Jean Paul Sartre y Simone de Beauvoir.
-El "Café de la Paix", junto al Teatro de L´Opera desde 1867, vio pasar a Jean Jaures, Oscar Wilde, Émile Zola, Giuseppe Verdi, Shirley Mc Laine, Gilbert Bécaud, Guy de Maupassant y Enrico Caruso.
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Carta del Café de la Paix |
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Carta del Café de la Paix
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Carta del Café de la Paix |
Italia
-Café "Florian", ubicado en la Piazza San Marco de Venecia desde 1720, lugar de "parada" de Lord Byron, Jean Jaques Rousseau, Charles Dickens y Marcel Proust.
-El "Greco", ubicado en Roma desde 1760, que contó con la presencia de Franz Liszt, Richard Wagner y Johann Von Goethe entre otros.
-El "Café de París", que desde la década del '50 sirve de lugar de reunión para artistas y productores de la industria del cine, y que aparece en la película "La Dolce Vita" de Fellini.
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Café Florian |
España
-El café "Gijón" que está en Madrid desde 1888, lugar de reunión y charlas en distintas épocas de Benito Pérez Galdós, Antonio Machado, Federico García Lorca, Rubén Darío, Camilo José Cela, Santiago Ramón y Cajal, Alejandro Casona, Rafael Alberti y Ramón del Valle Inclán.
-El "Café de Pombo", en Madrid desde inicios del siglo XIX, lugar de reunión de Ortega y Gasset, Pío Baroja, Ramón Gómez de la Serna y Miguel Unamuno.
(Si hubiera estado en Madrid en esos años hubiera ido al Gijón sin lugar a dudas.)
-"El Gato Negro", por donde pasaron Jacinto Benavente, Juán Ramón Jiménez y Ramón del Valle Inclán.
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Café Gijón |
Otras ciudades de Europa
-"Romanisches café" en
Berlín, que vio pasar a Bertolt Brecht y Kurt Weill.
-Café "Slavia" en
Praga, lugar de "parada" de Franz Kafka y Rainer María Rilke.
-Café "Landtmann" en
Viena, que vio pasar a Stefan Zweig y Sigmund Freud.
-Café "L´Alban Chambon" en
Bruselas, donde solían "parar" Arthur Rubinstein y Albert Einstein.
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Café Slavia |
Y, para terminar, recalamos en
Buenos Aires:
-Café "Los Inmortales", entre 1893 y 1914 se reunían allí los modernistas que seguían a Rubén Darío —Roberto J. Payró, Alberto Holmberg y José Ingenieros, entre otros—, y sus sucesores —Evaristo Carriego, Alberto Gerchunoff, Enrique Banchs y Horacio Quiroga, entre otros—, y donde también concurrieron a su paso por Bs.As., Jacinto Benavente y Ramón del Valle Inclán.
Su historia está contada en el magnífico libro
El café de los Inmortales de Vicente Martínez Cuitiño escrito en Mayo de 1949.
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Tapa del libro El café de los Inmortales |
-Hacia finales de los veinte entran en escena el mítico "Tortoni", fundado en 1858, con el grupo La Peña que se declaraba neutral en el "enfrentamiento" entre el grupo Florida de "La Richmond" (otro café) y el grupo Boedo del café "El Japonés". Los primeros en frecuentar el "Tortoni" fueron un grupo de escritores, músicos, pintores y periodistas encabezados por Benito Quinquela Martín, entre sus habitués de todas las épocas estuvieron: Antonio Cunill Cabanillas, Ricardo Güiraldes, Edmundo Guibourg, Ulyses Petit de Murat, Raúl Scalabrini Ortiz, César Tiempo, Conrado Nalé Roxlo, Francisco Luis Bernárdez, Leopoldo Marechal, Alfonsina Storni, Emilio Pettoruti, Xul Solar, Raúl González Tuñon, Baldomero Fernández Moreno y muchos más.
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Café Tortoni |
-En el café y confitería "Richmond", fundada en 1917, en la calle Florida 468 y que ya no existe —en el local al que por suerte se le pudo salvar la arquitectura, hoy hay un negocio de venta de zapatillas "alta llanta"—, se gestó en 1924 el periódico
Martín Fierro que reunía a los escritores: Conrado Nalé Roxlo, Cayetano Córdova Iturburu y Ernesto Palacio, entre otros; también fueron habitués los responsables de las revistas
Proa,
Prisma e
Inicial (surgidas a partir de 1921): Jorge Luis Borges, Antonio Güiraldes, Macedonio Fernandez, Oliverio Girondo, Francisco Luis Bernárdez y Leopoldo Marechal. También concurría a "La Richmond" Sigfrido Radaelli responsable de la revista
Megáfono.
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La Richmond |
-Y para terminar, no puedo dejar de mencionar el café "Chambery", café poco nombrado por los historiadores de los cafés porteños, pero recordado por los que concurrían a sus mesas. El "Chambery" estaba ubicado en la intersección de la Av. Córdoba y San Martín, en la esquina que volvió después de mucho tiempo al rubro cafetero con un Starbucks. En aquellos tiempos, sus propietarios eran mis tíos Juan y Eduardo, y mi papá era el barman (como se decía en aquella época). A él concurrían: Ernesto Sábato a tomar siempre su copa de vino, Oliverio Girondo, el cantante de tango Alberto Morán y el actor Alfredo Barbieri junto con sus compañeros de actuación en los teatros de revista (aunque él era el único que iba con la ropa con la que actuaba: frac, galera y bastón).
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Mi papá de traje
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Mi tío Juán en la caja, con los mozos del café |
También se reunían allí los surrealistas, poetas, escritores y pintores, gestándose las revistas
La Rueda y
A partir de cero, las dos publicaciones surrealistas de la época. Entre ellos, fueron sus habitués Carlos Latorre, Julio Llinás, Enrique Molina, Aldo Pellegrini, Francisco Madariaga y Esteban Fazio; Alberto Greco, Luís Wells, Kenneth Kemble, Enrique Barilari y Mario Pucciarelli entre otros.
Lo mencionan en sus libros: Juan Jose Sebreli,
El tiempo de una vida; Ernesto Goldar en
Vida cotidiana en la década del 50; Olga Orozco y Gloria Alcorta en
Travesías. Conversaciones coordinadas por Antonio Requeni; Osvaldo Borda en sus
Confesiones y Confusiones. Retrospectiva del pintor y su época; y la revista de artes visuales
Ramona, Nro. 47 del 2004, en el artículo "Un brindis por el sordo Masotta y sus cócteles explosivos".
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Carta del Chambery |
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Carta del Chambery |
Espero que les haya gustado este recorrido y, ¡feliz Día del café!